La Zona de Confort

Muchas empresas se encuentran estancadas ¿lo sabías?. Ya que por más esfuerzos que hagan se parecen a un vehículo estancado en el lodo, haciendo mucho esfuerzo y moviendo el lodo para todos lados el resultado es no poder avanzar para ningún lado.

¿Algo de esto se te hace familiar?

 

"Trabajo todos los días de sol y sombra y mis ventas siguen igual mes a mes y mis clientes también".

 

 ¿ Se han preguntado las empresas porque esta estancado su negocio?

 

 El problema de que tu negocio este estancado se debe a la zona de confort.  La zona de confort la podemos definir como aquel comportamiento diario el cual mantiene siempre en los límites que la misma empresa se ha definido.

 

 El problema con la zona de confort es que en la práctica tanto a nivel personal como en la empresa se limita totalmente el crecimiento y la mejora continua.

 

Estar en la zona de confort destruye las iniciativas y motivaciones personales y esta es la razón por las que muchas empresas se pasan años sin crecer, pues están totalmente estancadas. Pero la culpa es del empresario que se encuentra en dicha zona de confort, y no es capaz de identificar que esta ahi.

 

Lo cómodos que nos encontramos en los entornos que conocemos y lo reacios que somos a tomar nuevos caminos ante la incertidumbre de lo que vendrá y el miedo asociado a ese desconocimiento.

 

 Pero ese miedo a lo desconocido…,  ¿no es el mismo que nos lleva a pensar en las personas con diversidad funcional con tantas reservas?,  ¿no es ese miedo el que nos impide contratar a profesionales especializados ante la incertidumbre del cambio que pueda introducir en nuestras empresas? ¿Acaso no se vería alterada nuestra zona de confort con nuevos planteamientos empresariales que dieran un giro importante a la empresa?

 

Atreverse a romper con ese miedo, pararse un momento y reconocer esas barreras internas y externas que impiden nuestro crecimiento y expansión esa es la solución para llevar nuestro negocio adelante. Tú negocio crecerá si tu creces.

 

 

La zona de confort puede ser tu mejor amiga o tu peor enemiga. Si aprendes a identificar cuando estas en ella y a retarte para salir de ella se convierte en tu mejor amiga. Si por el contrario ya se te hizo costumbre estar ahí todo el tiempo pues entonces se convertirá en tu peor enemiga.